En la última fecha del Grupo B del Mundial de Estados Unidos 1994 se enfrentaban Rusia y Camerún. A pesar de que ambos equipos ya estaban eliminados se registraron en ese partido dos records en la historia de los mundiales.
El encuentro terminó 6 a 1 a favor de los rusos y Oleg Salenko -quien después resultó ser uno de los máximos goleadores del torneo junto al búlgaro Hristo Stoichkov con 6 tantos cada uno- marcó 5 goles, batiendo el récord de mayor cantidad de goles anotados en un solo un partido en la historia de los mundiales.
El sexto gol, el restante de la selección de Rusia fue marcado por Dmitri Radchenko.
El tanto de los cameruneses fue hecho por Roger Milla que se convirtió en el jugador más longevo en anotar un gol en toda la historia de los mundiales con 42 años. Durante varios años Milla fue el jugador más veterano en disputar un campeonato del mundo.
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