El 2 de abril de 1997 Argentina y Bolivia se enfrentaban por las eliminatorias para el mundial que se iba a disputar al año siguiente en Francia.
El partido terminó 2 a 1 a favor de Bolivia. Los goles bolivianos fueron marcados por Marco Sandy y Fernando Ochoaizpur, mientras que Néstor Gorosito marcó de penal el empate transitorio para Argentina, sobre el final del primer tiempo.
Pero lo más resonante de este encuentro fue la tensión que se vivió en su transcurso y también en la previa.
Daniel Passarella, entrenador de la selección en aquel entonces, habría hecho declaraciones a la prensa criticando la decisión de jugar el partido en la altura.
Ya durante el partido, el primer altercado fue cuando un dirigente de la federación boliviana, que se encontraba en el banco de suplentes de la selección local, golpeó a un integrante del cuerpo técnico de la selección argentina., Luego, también durante el partido, hibo mucha tensión y entre los jugadores y fueron expulsados por juego brusco Gustavo Zapata y Nelson Vivas. Además el guardavallas Ignacio"Nacho" González le aplicó un cabezazo al delantero boliviano Demetrio Angola a espaldas del árbitro.
A pocos minutos del final del partido, Julio Cruz fue a buscar el balón y recibió un golpe de puño de parte de un integrante de la delegación boliviana que se encontraba en el banco de los suplentes.
Esta agresión detonó un enfrentamiento de los jugadores argentinos con la policía y algunos futbolistas recibieron gases lacrimógenos.
También se puede marcar de la agresión a Cruz, que el golpe había sido en uno de sus pómulos y esto fue motivo de debate y discusiones porque tenía un corte en una de sus mejillas cuando la agresión habría sido en el otro pómulo.
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