Nació en 1958 y fue considerado el mejor futbolista salvadoreño de la historia. Era poseedor de una extraordinaria habilidad con el balón y un talento superlativo. Su aporte fue decisivo para posibilitar la clasificación de El Salvador para el mundial de 1982
disputado en España. Allí se produjo una circunstancia que demuestra claramente su jerarquía internacional. A pesar de que los salvadoreños perdieron en ese torneo ecuménico que los tres partidos que disputaron y obviamente no pasaron la primera ronda, el
Mágico integró finalmente el equipo ideal del torneo por haber demostrado en los escasos juegos que disputó su exquisita calidad técnica.
Comenzó jugando en el ANTEL FC de su país, luego pasó al Independiente FC y de ahí saltó al FAS donde se afianzó y tras el mundial de España fue transferido al Cadiz español donde fue ídolo del equipo andaluz jugando hasta 1991. También estuvo una temporada
en el Valladolid (1987-88).
Luego de sus años en España, retornó a El Salvador jugando hasta los 40 años.
Fue conocido tanto por sus gambetas como por su excesivo lirismo y su desapego al sacrificio, que indudablemente marcaron el techo de sus condiciones naturales, que eran infinitas. Jorge González, el "Mágico", fue uno de los grandes jugadores de todos los tiempos.
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