En los últimos días un diario británico publicó que el International Board está pensando en implementar la tarjeta azul. Este sanción se aplicaría para el exceso en las protestas y también para las faltas que no se consideren de expulsión como las faltas tácticas. Su imposición implicaría una suspensión de 10 minutos.
Históricamente existieron la tarjeta amarilla de amonestación y la roja de expulsión. Estas se pusieron en vigencia hasta la actualidad y se adoptaron en el mundial de México 1970, aunque ya se habían usado dos años atrás en el torneo de futbol de los juegos olímpicos de 1968, que también se realizaron en México.
El autor de la idea fue Ken Aston, árbitro inglés que dirigió entre otros partidos recordados, aquel entre Chile e Italia del mundial de Chile 1962, conocido como “La batalla de Santiago”. Está iniciativa tomó fuerza luego de aquella recordada expulsión de Antonio Rattín en el partido entre Inglaterra y Argentina en el mundial de Inglaterra 1966.
Aston se inspiró en un semáforo para crear el sistema de las tarjetas, y el primer partido desde que se adoptó en forma definitiva en 1970 fue en el cotejo que inauguró el mundial de ese año entre México y la Unión Soviética. El primero en recibir una amarilla fue el soviético Kaji Asatiani. La primer tarjeta roja en una Copa del mundo fue en 1974, en un encuentro entre Alemania Federal y Chile, y el que vio la roja fue Carlos Caszely luego de una falta sobre Berti Vogts.
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